¿Estamos preparados?

Artículo de Ricardo Andrée subido a Facebook el 1 de mayo de 2017.

Lo proponemos después de cinco años, considerando su plena vigencia. Dado lo extenso del mismo, en esta edición lo hemos separado por ‘partes’, para una mejor lectura.

Se que leer ya no está de moda, menos si el texto es más de 140 caracteres. Pero soy enchapado a la antigua: todavía creo en la exposición de las ideas, la reflexión y la capacidad para discernir incluso aquello con lo cual no concordamos. Así que sigo publicando libros de papel y tinta, y me resisto a venderlos como PDF. E insisto en compartir estos textos largos llenos de vivencia y inquietud interior. Ojalá aún existan valientes que osan cavilar, meditar y reflexionar… y leer. Bueno aquí comparto algo que ojalá dé luz a cualquiera de ustedes.

Primera parte

Está demás demostrar y resaltar los acontecimientos que cada día podemos ver y oír a través de la amplia red de comunicación con la cual hoy contamos.

Basta que con voluntad y un mínimo de esfuerzo pongamos en contexto las noticias que quizás no hallaremos en los noticieros de la tv local, pero sí podremos escrutar e indagar navegando vía internet por diarios, portadas, agencias de noticias de todo el planeta. Allí sabremos de constantes que debieran alarmarnos: las inundaciones, por ejemplo, y todo lo referente a las manifestaciones climáticas completamente desbordadas y alteradas. La guerra, otro ejemplo, cuya escalada apunta a confrontaciones mayores, entre naciones con poder nuclear, y que involucran a las potencias militares del planeta. La crisis política que atraviesa a todo sistema y la tendencia inusitada a solucionarla mediante el ya conocido itinerario del fascismo (de derecha o de ‘izquierda’), del chauvinismo, de la violencia y la confrontación. La diáspora de masas moviéndose de una geografía a otra en una migración forzada como nunca antes… es tal vez la imagen más conmovedora y evidente de la gran crisis planetaria causada por el Hombre.

Los ancestros, nuestros originales, creían que la Tierra era un Ser Vivo, y que reaccionaba a según de como se le tratase en concordancia con leyes naturales que el Hombre debía adoptar y aplicar.

La reacción del planeta ante la voluntad destructora de un sistema humano de carácter cainita… parece ser cada vez más furibunda y determinante.

Sabemos que somos parte de un universo que poco entendemos y del cual somos en gran parte ignorantes. Pero por Sabiduría se nos enseña que aquello que nos sucede en la Tierra también es EFECTO de CAUSAS Cósmicas que no alcanzamos a vislumbrar.

Quienes hemos vivido el Camino Espiritual entendemos que este estado de TRIBULACIÓN ya no es reversible…que pudimos frenar y cambiar…pero que ha ya sobrepasado la línea de cambio y hemos entrado en la vorágine de los tiempos retrógrados. Y para quienes entiendan lo que significa ‘entrar en retrogrado’ ya deben tener certeza de aquello que nos espera.

Estos últimos 25 años han sido los últimos de una extrema frontera en la cual pudimos dar un golpe de timón. Aquello que hoy vivimos, según La Sabiduría del I Ching, comenzó a gestarse hace 70 años. En el año 2018 se cumplen esos 70 años en que pudimos construir otro mundo… y fracasamos. Y ‘fracasamos’ porque no supimos entender la vida y el mundo en el cual habitamos basados en la Paz; no llegamos a concebir la sociedad y la construcción de la Paz como un derivado de la Espiritualidad que todos tenemos (porque somos Espíritus antes que Carne); y no supimos liberarnos de las estructuras mentales y emocionales estrechamente ligadas a lo material, al ego, y al individualismo, y al perverso mercado. Así, cada oportunidad de nueva construcción de sociedad o modo de concebir la existencia en este mundo fue cayendo en los mismos abismos de siempre: la avaricia, el ego y sus luchas fratricidas, el uso maligno del poder, la necesidad de imponer y de sujetar, las disputas y ambiciones generadas por el dinero, la injusticia en el nombre de la justicia, las cadenas en el nombre de la libertad, la religión en el nombre del dios verdadero. Es decir: el mismo sistema de esclavitud que bajo otros parangones y vocablo igualmente conducen al Hombre a su auto destrucción.

Segunda parte

Las personas Espirituales no podemos optar por el caos: porque el desorden creado de Implosiones es el comportamiento de la materia oscura.

Nosotros somos parte del Reino de la Luz: vamos expandiendo, sembrando, extendiendo nuestra creación mediante núcleos ordenados de Paz, de armonía, que deben actuar cuan Corpúsculos cuyos gajos al llegar a su desarrollo se deprenden para sembrar otros campos en donde la Luz sea Reino de Creación.

Así nos enseña Cristo: que la Luz que obtenemos cuan semilla en nuestras alforjas, las lancemos a la Tierra justa de otros que por fe también buscan crecer en Espiritualidad y formar parte de esta Gran Siembra de Luz. Nadie que tenga la Luz del Reino Espiritual, aunque mínima, puede guardarla o esconderla: es necesario expandir la Luz del Espíritu no para propio engrandecimiento, sino para asegurar la expansión de un Reino de Bien del cual somos PARTÍCIPES por poseer en nosotros el Espíritu de Dios: Nuestro Espíritu.

Las personas Espirituales no podemos desesperarnos y caer en las formas del Mal: la rabia, la violencia, la desazón y la derrota ante las evidencias que nos golpean. No hay espacio para depresiones, estrés y cansancios de frente a una realidad que nos es completamente contraria.

Porque hoy, en este Mundo, quienes postulamos a la Espiritualidad y al modo de Ser y Hacer de la Luz somos minoría; y lo nuestro es una locura que atenta en contra de una normalidad destructora que se ha insertado cuan normalidad obligada en nuestras vidas: así vamos por el Mundo sobreviviendo con la vista pegada al piso porque no nos atrevemos a mirar a los ojos de la verdad.

Tenemos grandes desventajas- quienes insistimos en oponernos a las formas oscuras de lo mundano- sobre todo ahora que ya se han cerrado los años para experimentar soluciones y proponer alternativas reales y realizables-; porque ahora sólo nos queda nuestra propia Coherencia y la pequeña Siembra que vayamos generando en nuestro entorno.

En estos 70 años, y en especial en estos 25 últimos años, pudimos creer y crear (en) comunidades con un sentido de paz, de justicia y de amor… o cambiar desde adentro a religiones heredadas de nuestra cultura; o proponer actitudes para fomentar una nueva era, o luchar por un modo diverso de entender y hacer política; o apoyar y entusiasmarnos ante ‘proceso de cambios’ políticos y sociales que parecían distintos y por fin renovadores; o esperanzarnos – con razón o por imaginación- en legiones extra terrestres que nos ayudarían a mutar la realidad polar y dual de este mundo… en fin. Al final todo fue cayendo por los mismos factores humanos que nos acerca tanto a la maldad: que hace inútil e innecesario que los demonios se manifiesten porque los Hombres del sistema cainita ya son seres haciendo la labor destructiva y divisionista de los infiernos.

Ningún proyecto de cambio puede sostenerse sin el CAMBIO en el Hombre. Y el Hombre NUNCA cambiará de cierto sin Espiritualidad, sin Coherencia de vida, en armonía con su Camino Espiritual. Y hablamos de Espiritualidad, y no de religión; y al decir ‘Espiritualidad’ concebimos SABIDURIA como el entendimiento divino de todas las cosas: pensar y actuar… como Dios lo hace. Amar como Dios ama. Es decir: Ser y hacer según el comportamiento de la Luz y no según el modo de existir de la oscuridad.

Tercera parte

Nosotros no Implosionamos para ocupar y copar mediante el caos: nosotros construimos y acrecentamos para que en LIBERTAD y por CONCIENCIA cada partícula de Vida se empodere de sus leyes y tenga ADMINISTRACION de su propia siembra de vida. Esto – que es el modo en como la Luz Primigenia (llamada ‘Padre’) logró asentar su Reino en una realidad macro hecha originariamente de materia oscura – es exactamente aquello que nosotros imitamos, emulamos y seguimos por herencia y obediencia.

Nosotros primero nos CULTIVAMOS a nosotros mismos en nuestra Espiritualidad y postulamos a que sea Nuestro Espíritu- (no el Alma; no la mente; no el cuerpo; no el mundo) – el único Gobierno de nuestro Ser. Y para lograr tal propósito básico de espiritualidad es que Meditamos, Oramos, y nos auto observamos en nuestra humanidad para discernir y desglosar lo oscuro y lo luminoso que nos habita y somos; en modo de optar y elegir la Luz en todo, y actuar en Coherencia según dicha elección.

Lo hacemos en Libertad: no por cumplir con otros o por deber religioso o para otros propósitos mundanos o del ego. Lo hacemos porque sabemos que nos encontramos prisioneros en la Franja del Tiempo que nos hace temporales y pasajeros: que enfermáremos, envejeceremos y moriremos.

Lo hacemos sabiendo exactamente que nos hallamos en un mundo intermedio en el cual Luz y Tinieblas litigan por la perla preciosa en el Hombre… sin que el Hombre esté al tanto del combate que se cierne sobre éste.

No buscamos la moral o el virtuosismo cuan panacea para comportarse: porque sabemos que sin Espíritu y Espiritualidad no hay moral ni virtud real, sino formal e hipócrita. Primero la Coherencia Espiritual: y la moral y la virtud serán natural en el Hombre Logrado.

Y sabemos que nadie puede prescindir de Dios en el Camino Espiritual: pero no un dios humano, menos un padre con estados de ánimos y emocionalidades que lo hacen parecer y actuar como un Hombre poderoso inquietantemente semejante a los demonios: hasta en donde la venganza, el castigo, la violencia y los infiernos son promesa ante la Libertad e imperfección del Hombre. No. Esa figura no es el Dios verdadero. Porque Dios no es un hombre, ni es humano… Es ESPIRITU. Es la Luz Primigenia que siembra en la oscuridad y la transforma, y en su expansión va creando Vida y Conciencia: el Gran Yo Soy.

Cuarta parte

Cristo es el Dios que nos acerca a la verdad del Origen de la Luz (llamado ‘El Padre’): y un Dios que viene del corazón de la Luz, y se hizo Uno con el Origen (Padre), es sin duda el único Ser Divino que nos puede conducir a lo más alto del Reino de la Creación.

Cristo NO reemplaza a nuestro Espíritu- sino lo potencia- porque nuestro Espíritu es una especie de gen divino que nos asemeja y nos hace a imagen de la Luz Primigenia.

La Luz divina en nosotros NUNCA tenderá ni será atraída a la oscuridad, y siempre busca ascender a su Origen, al RETORNO. Y es por tal razón que al unirnos a Cristo EN ESPIRITU nos elevamos en Conciencia, y nuestra existencia emprende nuevos rumbos muchas veces sacrificando la vieja voluntad mental, emocional o egotista que en lo mundano maneja nuestra existencia.

Sabemos que es el Alma (Psiquis- Sentidos)) la sustancia espiritual que en nosotros tiende a buscar a la oscuridad; también hemos constato que por el torbellino emocional la influencia Tenebrosa mejor se infiltra y manipula. Por lo mismo en el Camino Espiritual ‘aquietamos’ el Alma y trabajamos para que sea nuestro Espíritu- que es Dios en nosotros- aquel poder que se una al Alma- la espose- y la transfigure y eleve; y se hagan UNO en pos de la Luz Primigenia.

También sabemos y hemos asumido que la mente no es única: existe la mente natural; y en el curso del crecimiento del ego y del contacto con lo mundano va apareciendo la ‘mente artificial’. Y que el intelectualismo y la adoración al conocimiento sin SABIDURIA Espiritual es la idolatría a lo mental, en desmedro del Espíritu y del Camino Espiritual.

En el camino del Espíritu el Ser recupera su mente natural.

La realidad que sucede cuando por Espíritu nos unimos a Cristo asusta a muchos: porque se pierde el antiguo control de los deseos, del ego, de lo mundano y de lo carnal… y la VERDAD nos hace Libres.

¿Quiere de verdad ser Libre el Hombre?

Hemos comprobado en muchos años de pruebas, errores, sucesos, caídas y victorias que el Hombre no quiere ser Libre como Cristo nos hace libres: porque esa libertad RESPONSABLE y de COMPROMISO quita de nosotros la gobernabilidad del ego, y calma las emociones tormentosas  hasta removerlas a segundo plano y superarla, y trasciende lo mundano: y aquello crea en el individuo una primera sensación de vacío; y el temor, el miedo, invade desde lo oscuro de la persona y clama por retomar el anquilosado pero conocido ‘control´’.

Entonces, por inercia antigua, el Hombre convierte su Camino Espiritual… en una religión; y a las formas de Consagración y de Sabiduría en una estructura eclesiástica -o parecida – -(o de carácter terapéutica siempre muy egoísta)- que pueda controlar y gobernar desde la costumbre y sus agregados psicológicos mundanos.

El Hombre mundano ama su oscuridad: gusta empequeñecer, guardar y retener, apoderarse y nunca compartir; y desde lo obtenido pretende ejercer control sobre otros, o estimular la competencia, o esclavizar a los ignorantes, o ser asumido cuan líder mundano, gurú religioso o tirano con su propio sequito de aduladores. O convertir lo adquirido en una mercancía que entregue profito y abra las puertas al dios dinero.

Quinta parte

La oscuridad cae en crisis cíclicas: llamadas implosiones (estallidos por movimiento Retrogrado) y busca el caos o la saturación para desde tal hecatombe sacar mejor partido, iniciar de nuevo y acumular elementos para una nueva crisis. El comportamiento oscuro es destructivo y auto destructivo por antonomasia.

Los humanos por lo general hemos aceptado este comportamiento oscuro como normal: creemos que es ‘humano’ vivir en los abismos, mirar al pasado para justificar el presente y nunca cerrar puertas antiguas con el perdón y el arrepentimiento; asumimos que los bajos instintos, lo bestial, los desquicios emocionales y las crisis cíclicas son una ley humana y natural que se asocia incluso al amor (¡¡!!); creemos que los estallidos emocionales o sociales ‘arreglan’ las situaciones estresadas y condensadas. Aún más: propiciamos tales estados y cadena de acumulaciones, pues después de cada ‘crisis’ o ‘estallido’ nos sentimos renovados.

La Luz no conoce de esa esquizofrenia: lo suyo en Sembrar luz en los copos de luz ínfima de los otros, e incluso en la oscuridad, para que el Ser asuma que Dios Habita en su Ser, y opte por el Gobierno del Espíritu: precisamente para que no mande el torbellino del Alma (Emocional) y no seamos consecuencia de la mente artificial, y menos nos convirtamos en pantomimas del Mundo y de aquello que nos dicta el mercado y su perversidad.

La Luz NO HACE CRISIS – La expansión de la Luz pone en crisis al dominio de Lo Oscuro y provoca choques con Lo Tenebroso- y no cae en implosiones, ni explosiones, y menos en el caos: la Luz va convirtiendo todo lo oscuro en un modo de luz, y desde tal transformación o Transfiguración conforma Corpúsculos de Luz igual (INDOLE) que al nuclearse pueden desprenderse de la matriz y emprender su Siembra libre y propia, provocando de este modo la Expansión gradual de la luz. Y para ellos NO repele a la oscuridad: la Transforma mediante un Plan de Siembra que va ganando campos de luz sin eliminar los potenciales de la materia oscura. La Luz No destruye a la materia oscura: la Transforma.

Lo Contrario a la Luz y su reino es el Principado Tenebroso: que es el Poder Consciente nacido de una inversión de la Luz hacia su matriz oscura; este movimiento retrogrado de la luz hacia su raíz en la materia oscura provocó la excepción del Poder Tenebroso. (Recordemos que el ‘Ángel de la mañana’ o ‘Señor del Día’ era Luz potente cuyo misión y ley era la Creación de la Materia bajo las formas de la Luz. Al realizar el Movimiento Retrogrado hacia la raíz de la materia oscura NO perdió su ley natural, pero sí  transformó su Luz…en Tinieblas… repeliendo al Reino de la Luz y convirtiéndose en su Polar Contrario)

El Poder para crear materia desde Lo Oscuro fue un propósito original de la Luz, colocado en el depositario de Luz que luego hizo el viaje retrogrado a la matriz de la oscuridad, que le convirtió en divinidad tenebrosa. Y de esta manera la materia conocida y de la cual hacemos parte ha pasado a ser el Campo de Batalla entre lo Tenebroso y el Reino.

Lo Tenebroso empuja a la dependencia de la materia y ha buscado desde siempre entregar a ésta el mismo carácter de eternidad que sólo posee la Creación de Luz. Porque lo periódico de los ciclos de Implosiones y necesidad de caos no permite eternidad a lo Tenebroso, y perdura sólo a través de la materia.

En una creación solamente Espiritual lo Tenebroso sucumbiría.

Por lo mismo, la Luz No depende de la materia y transforma lo material en Cuerpo Espiritual o en un tipo de materia que el Hombre no conoce ni concibe.

Si los Hombres imitamos y seguimos el comportamiento de la Luz: debiéramos prescindir de la dependencia de la materia, y desde lo Espiritual podríamos tener, y de hecho tenemos: PODER sobre la materia conocida.

Lo que se entiende como ‘milagroso’ no es otra cosa que el Poder sobre esta materia que sólo se logra desde el Espíritu.

Sí, lo Tenebroso también posee Poder sobre la materia… es suya… pero no para destruirla y reemplazarla por Materia de Luz, sino que para hacer depender al Hombre de una materialidad que lo deslumbra y enceguece, y de la cual finalmente cae prisionero.

Ante una realidad tan compleja, en donde sólo desde el Espíritu y en unidad con la divinidad de Cristo el Hombre puede ascender al Camino Medio que le permita observar las leyes de la Tierra y conocer las leyes del Cielo… en medio de tantas ilusiones, apariencias y manifestaciones…desde lo emocional, mental y mundano… parece imposible liberarse de este Mundo; y sin liberarnos del Mundo nunca podremos ser Sembradores de Luz.

Siempre habrá otra prioridad antes de dedicar a Cultivarnos. Otras necesidades estarán antes que esta labor de Salvación y Elevación propia. Y esa es la trampa. Nunca saldremos adelante en nada, y nos morderemos la cola siempre, sin hallar la conexión espiritual con la Verdad de Cristo: una Verdad que sólo logramos POR ESPIRITU y por Espiritualidad.

Lo emocional, lo mundano, los deseos, los instintos, los agregados psicológicos, lo social y su apariencia… tienen el mando y gobierno también en nuestra intención espiritual. Así es como se han formado las religiones.

Desde verdades espirituales el Hombre ha manejado tales dadivas con lo ‘concreto del sistema del Mundo’ y sus intrincados pasajes de poder y dinero; y desde lo emocional ha pretendido usar a Dios para que éste entregue satisfacción; o desde lo mental se ha establecido la ‘creencia’ -(no el Compromiso con la propia coherencia de Fe)-  como ámbito de ‘libertad’ que al final construye un universo de idolatría y paganismo desenfrenado.

‘Que Dios se ocupa centralmente de lo humano y mundano’… ¡es la más grande de los engaños! Una falacia que insta al Hombre a ‘negociar’ con Dios su propio bien carnal, material, emocional y mental, social y hasta de bajos instintos. ¡Porque ha creído que Dios está para servirle a él!

Sexta parte

Dios es Espíritu y se le debe alcanzar POR y EN Espíritu. Y el Espíritu – una vez lograda su Unidad con su Origen – debe GOBERNAR sobre el Alma y las emociones, sobre la mente y el conocimiento, sobre la carne y sus necesidades, y también sobre lo mundano que debe ser transformado desde el Poder de la Luz. La Luz necesita de la Luz.

Cuando los Hombres supieron esta verdad y la hallaron complicada, difícil, y que implicaba sacrificio de lo carnal cuan prioridad, y renuncia a las tentaciones de lo tenebroso que ofrece goce temporal de lo material…a cambio de larga posesión del Alma… comenzaron a negociar con Dios y con el Diablo…así de literal…para convertirse en la ‘tercera fuerza’ entre el principado tenebroso y el Reino de la Luz. A eso la Sabiduría de Cristo llama ‘la plaga y peste de la apostasía’.

¿Por qué el Mundo está yendo directo a la hecatombe, a la implosión y a la saturación?

Porque se ha regido por las leyes oscuras y ha rechazado las leyes de la Luz. Porque quienes se dicen religiones divinas, aun proclamado a Dios, son Apostasía que postula al Hombre del Mundo como tercera fuerza entre Dios y lo Tenebroso.

Las religiones, como los supra gobiernos que realmente mandan en este mundo, juegan a ser pequeños dioses que toman de los poderes de maldad aquello que les sea útil para imponer sus privilegios y poderío; y nombran y se auto nominan emisarios de Dios, de sus divinidades y santos y profetas… solamente para alzar la propia pequeña divinidad que los autentifique como Gobierno Mundial o parte del Gobierno absoluto de este mundo. De ahí la necesidad de riquezas, de masividad, de participar en política y hacer parte de la nomenclatura del Estado.

El Camino Espiritual NUNCA armonizará con los juegos de poder en el Sistema del Mundo. Jamás buscará riquezas y tampoco masividad de ovejas sin discernimiento y sin Camino Espiritual Propio. Para Dios es FUNDAMENTAL CULTIVAR el propio Espíritu para lograr la Libertad de OPTAR por el REINO de la LUZ. Sólo así SERVIMOS al PLAN de Dios. Sólo de este modo nos hacemos Agentes de Luz actuando en la oscuridad. Así, y solamente así somos enemigos reales de las Tinieblas. Todo el resto: es parte intrincada de la misma mentira.

La COHERENCIA es el corazón de nuestra acción y de la siembra con otros, y de nuestras relaciones en este Mundo y su Sistema: SER LO QUE SOMOS Y VIVIMOS EN ESPIRITU. HACER COMO DIOS HACE EN SU LUZ. SER Y HACER COMO CRISTO NOS INDUCE Y CONDUCE MEDIANTE NUESTRA RELACIÓN ESPIRITUAL CON SU DIVINIDAD.

Todo podemos hacer y Ser en esta Tierra: jóvenes que se divierten, padres y madres, esposos y esposas, trabajadores y personas de arte: debemos vivir bien, sin lujos pero sin deudas y sin sobre saltos… y desde lo Espiritual, ejerciendo Poder sobre la materia: nunca el Ser Espiritual debiera tener como labor central y de dependencia el dinero y las exigencias mercantiles del Mundo.

La teología del sufrimiento, y que para trascender debemos pasarlo mal, incluso auto infringirnos daño:  es teoría tenebrosa que va en el sentido de la autodestrucción.

Sin duda que no lo pasamos bien en la enfermedad y en el envejecimiento, y nos asusta la muerte; por cierto es que al tomar el Camino de Dios debemos sacrificar lo mundano que nos atosiga y nos controla…y eso duele. La consecuencia de hallarnos en un mundo dual, polar, intermedio y temporal lógicamente conlleva a pesares y momentos de conflictos, errores y caídas; pero la Conciencia que nos da el saber en qué tipo de mundo nos encontramos, y lo que significa estar viviendo en una Franja de Tiempo (ilusión), y la sapiencia de que tenemos a Dios en nosotros (Espíritu)… (pero que todo el resto nos empuja a encarcelar nuestra divinidad e irnos por las vías fáciles de lo sensual, lo emocional, lo carnal, lo mundano, la materia y sus expresiones)… nos coloca ante un COMBATE, una DECISIÓN, una OPCIÓN: o somos personas espirituales… para desde allí enfrentar la carnalidad y lo de este Mundo….o somos personas carnales, emocionales, artificialmente mentales,  y mundanas, que anularán y encarcelarán a su Espíritu (quizás auto engañándonos al ‘creer’ en Dios y ‘negociar’ con la fe de la creencia para obtener aquello que mi carne, emocionalidad y mundanidad requieren) PERO NADIE PUEDE PERTENECER A DOS REALIDADES QUE CONFORMAN REINOS OPUESTOS.

Los mayores sufrimientos se tienen cuando nos quedamos en medio de la incertidumbre: clamando a Dios para satisfacción de la carne y de lo mundano.

O Fríos o Calientes… Dios vomita a los tibios. El demonio usa a los tibios y luego los desecha como a muñecos de aserrín.

Lo peor que puede hacer el Hombre es pretender ser un pequeño dios intentando mercantilizar su supuesto ‘poder’ entre Dios y los Infiernos: es la necedad más inverosímil que el Hombre hace, y que lo encadena a una ya antigua esclavitud que no ha logrado superar.

Mientras que otros Hombres han optado por lo Tenebroso y se comportan como la materia oscura: y estamos quienes en nuestra minoría y silencio sembramos Luz desde el potenciamiento de la Luz en nosotros…para que sea Dios quién actúe por medio de nuestra obra. Y por eso somos agentes del Reino, y ofrecemos un Camino Espiritual para que el Hombre sea Libre en la Verdad que Cristo muestra y gobierna.

¿Estamos preparados? Basta un día, un salto, un primer paso para entrar en la Opción que conduce a que nuestro Espíritu Gobierne en alianza y reciprocidad con la Divinidad de Cristo.

Antes: debemos expulsar toda vieja idea de lo espiritual y no confundirlo con religión, iglesia y política en el Mundo. Pero sobre todo debemos liberar a Cristo de las tenazas de la apostasía y asumir en honestidad que NO conocemos al Cristo de Verdad sino que tenemos imágenes de un Jesús manejado por el voraz apetito de poder de los Hombres.

Debemos hacer como Lao tse aconseja: antes de proponerte entrar en el Tao debes vomitar todo conocimiento adquirido en el Mundo y su Sistema. Así es: el Camino Espiritual requiere libertad de criterios y para ello es fundamental romper los traumas inoculado por la cultura mundana y religiosa que se ha apoderado de lo santo y sabio para usarlo mañosamente y tergiversarlo.

Conclusión

Los días venideros, y los años próximos, viviremos el agudizar de todo cuanto hoy se nos muestra ya como avisos certeros de una Tribulación en ascenso que no supimos evitar y cambiar.

Ahora es el momento para Saltar al Cielo.

1 de mayo 2017

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