Desde esta edición, la número 13, como Cuerpo de Sacerdotes Mayores de la Orden de Melquisedec, nos hacemos cargo de la conducción y dirección de este medio de difusión del Sacerdocio bajo la Ley de Cristo. Este cambio, tal como lo explicara en la edición pasada su anterior Director, obedece principalmente a que él, nuestro hermano Sacerdote de ésta misma Orden, inicia labores de alta responsabilidad espiritual en otras áreas y lugares en obediencia a las directas indicaciones del Reino Vivo, que siempre está actuante y preparando los hechos que se irán sucediendo en estos Tiempos y en los venideros, ante la inminente Segunda Venida de Cristo nuestro Dios y Sumo Sacerdote Celestial.
Ya desde hace aproximadamente 10 años atrás, Cristo nos pedía que difundiéramos Su Voz y Su Ley a todo el mundo. Nos mirábamos entre todos y nos preguntábamos cómo lo haríamos, o cuántas vidas necesitaríamos para llegar a todos los lugares y cumplir con Su voluntad. Internet aún estaba en pañales, el fax y el teléfono era lo más avanzado en ese entonces para comunicarnos con quienes estaban distantes, ¡pero a todo el mundo!… era casi imposible. Una tierna sonrisa debe haber dibujado Cristo en Su rostro en ese entonces, porque ya nos tenía preparado todo, y nos entregaría en un abrir y cerrar de ojos estas herramientas tecnológicas que ya están al alcance de todos. Hoy podemos decirle: Si Señor, lo haremos. Y aquí estamos, a la distancia de un ‘click’ de quien esté en cualquier parte del mundo: hoy la distancia no existe, hoy existe esta maravilla de las Telecomunicaciones, sabiduría que Cristo ha permitido al hombre, necesaria para estos Tiempos de toma de conciencia y opción.
De esta forma, hemos asumido esta importante labor con humildad y alegría, y hemos ofrendado a Cristo nuestro tiempo, empeño y esfuerzo para que esta Revista permanezca en su pedestal Sacerdotal y espiritual, que ha sido reconocido por sus habituales lectores y colaboradores. Hacemos un llamado entonces a ellos y a todos para que se integren cada vez más a su contenido con sus valiosos comentarios y aportes, y también sean quienes nos ayuden a difundir a más personas estos escritos y lleguen a todo rincón del planeta. Entonces serán ustedes bendecidos al participar también de ésta que es Su voluntad.
Consagrar cada vez a más Creyentes, siempre será la Santa labor encomendada, por lo tanto lo que escribimos seguirá teniendo ese llamado a usted para que opte por Pertenecer a Cristo, no a una institución de “buenas personas” que se reúnen para hablar de Dios, sino a un Dios Vivo que nos habla directamente y que remece a quien no lo quiere escuchar.
Finalmente invitamos a todo creyente en Dios Padre, en Cristo y en el Espíritu Santo a inscribirse en la próxima Escuela de Investigadores (ver detalles más abajo), cuyo objetivo es entregar a ustedes la claridad de este Camino de Consagración y Sabiduría, y optar en conciencia y por propia voluntad en alcanzar el fin último para todo Hombre que pase por éste mundo, y que es, cuan Consagrado, “Hacer la Voluntad del Padre”, bajo la guía del Sacerdocio de Cristo, en el Camino de Cristo y bajo Su Santa Ley.
En nombre del Sacerdocio Mayor de Melquisedec
CARLOS ALVARADO C.
Sumo Sacerdote.
INVITACIÓN
Invitamos a las ESCUELAS DE INVESTIGADORES a desarrollarse en las ciudades de Santiago, Arica, La Serena y San Felipe.
Requisitos:
– Ser creyente en Dios Padre, en Cristo y en el Espíritu Santo.
– Edad mínima: 18 años.
Para contactarnos, acceda a los Blog de cada zona (ver Links de interés al costado derecho), donde encontrará los nombres de las personas con quienes inscribirse.