8 de Diciembre: nuestra Reafirmación de Fe

Ante la enésima demostración de puro paganismo y superstición popular incentivada por la empresa de masas que es la iglesia católica al promover eventos de mercantilismo y superchería que extravían la Fe en Cristo y levantan la adoración a figuras, y colocan la vana esperanza de la gente en favores milagrosos… nosotros, el Sacerdocio bajo la Ley de Cristo reafirmamos:

 

1)      Cristo es Dios, el Verbo del Padre Creador, depositario y gestor del Magisterio del Espíritu Santo, único conducto y conductor que el Hombre tiene para entender y poner por Obra la Voluntad del Creador. Ley de Vida y garantía justa de la Resurrección que supera y vence a la muerte.

2)      Cristo en Jesús libera la Deuda del Adán Caído (Hombres) A) pagando por el pecado de rebeldía y muerte de los padres Adámicos (12 días de martirio y muerte física en la cruz de los romanos); B) y en Tres Días vence a las potestades infernales que poseían las llaves de los Abismo y del Paso por la Muerte, y de este modo la muerte YA no fue, nunca más, dominio de las tinieblas…sino Paso de Resurrección en donde cada Ser obtiene el fruto de su siembra. C) Y a los Abismos ya nadie cae sino quienes por siembra de vida en este Mundo así lo ameritan. Así, Cristo Restaura la Potestad del Espíritu de Dios en el Hombre y cumple: ‘en Tres Días alzaré el Nuevo Templo’.

3)      Desde entonces, al decir de Pablo, ya nadie nace en pecado, sino nos hacemos al pecado. Y la Consagración a Cristo en su Plan de Vida es un camino superior que solo podemos transitar EN y CON Espíritu. El Espíritu de Dios NOS VIVE.

4)      Al final de los 40 días de Restauración, cuando anduvo entre sus ‘otros rediles’, Cristo asciende al Reino del cual es Gobernante desde los Inicios y el Principio, y Desciende sobre la Fe y el Espíritu de los Hombres el Magisterio del Espíritu Santo; en modo que el Espíritu que habita al Hombre y la Sabiduría de santidad del Paráclitos transformen al Ser y lo preparen para Vida Eterna.

5)      El PLAN entonces es que Cristo nos Conduce al Padre no por IGNORANCIA, no por conocimiento mundano o solamente mental, y menos por desfiles y parafernalias, sino SABIDURIA: 1) Aceptar y Vivir a nuestro Espíritu (‘El Espíritu os enseñará todo’); 2) Asumir el Compromiso de Fe con Cristo que nos coloca cuan Discípulos- de su divinidad; 3) que bajo tal Convenio o Pacto de Fe y Lealtad llegaremos a descubrir y a poner por Obra la Voluntad del Padre, en obediencia y sin el pesado ego mundano (Humildad); 4) que por el poder de la Oración y la Contemplación recibiremos Magisterio del Espíritu Santo; 5) que todo aquello que vivamos en nuestra Relación Espiritual con Cristo también será siembra de nuestra acción entre los creyentes para que ellos y ellas también se consagren a este Camino hacia la Vida Eterna. (‘¿Quién que obtenga la luz esconderá la lámpara debajo de su cama en donde nadie la vea…?’)

6)      Bajo este cristal, con la atención puesta en estos puntos, vamos a leer ahora el Evangelio de Juan y lo comparamos con los otros tres evangelistas… y constatamos que es esto, y no otro, el centro neurálgico del Hecho Cristico, es decir: el Plan de Cristo Dios para Elevar, Salvar y Redimir a los Hombres. Ni asambleas repetitivas, ni histrionismos, ni procesiones, ni martirios a la Carne, ni negociación de la fe para obtener favores, y menos, mucho menos las penosas marchas de hombres, mujeres y niños que sacrifican lo que consideran… creyendo que alguien que no es Dios, que no es Cristo, que no es el Espíritu Santo podría concederles….

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Quienes incentivan tal engaño…ya son Hijos e Hijas de Perdición y habitantes naturales de los avernos.

 ¡Ya no basta con Creer…es urgente, es necesario Consagrarse a Cristo Dios!

 

-Congregación Evangelista Carismática-

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